El suministro energético y el cambio climático son los dos grandes problemas a los que se enfrentan los municipios en su transición energética. La solución es hacerlos más sostenibles y autosuficientes: Sustituir combustibles fósiles por energía más barata, autóctona y renovable.
SOMACYL impulsa en Castilla y León sustituciones individuales de calderas de combustible fósil por calderas de biomasa en edificios públicos y redes de calor sostenible, un elemento clave para la transformación urbana hacia un nuevo modelo energético. Gracias a ellas los municipios disponen de una fuente de calefacción más limpia y sostenible.
Las redes de calor se componen de una planta de generación de energía térmica renovable, mediante el uso de biomasa o biogás, y una red de transporte eficiente de agua caliente desde la planta hasta los edificios.